Se puede disminuir en forma controlada un 50% del agua de riego en siembras de tomates cherry, conservando sus cualidades a nivel comercial, valor energético y funcional.
Agua y carotenoides beneficiosos
Esta es la deducción principal que ha resultado de un estudio realizado por la Universidad de Sevilla. El estudio apunta que con menos agua es posible aumentar la cantidad de carotenoides.
Los carotenoides son pigmentos de gran atractivo en agroalimentación. Aparte de ser pigmentos naturales, unos son predecesores de la vitamina A y favorables a la salud.
Son compuestos de gran diversidad y relevancia en la agricultura, nutrición, salud, entre otros. Es por esto que el mercado de dichos compuestos crece a pasos agigantados.
Además, varios análisis exponen que cantidades acordes de carotenoides en la dieta, pueden fungir positivamente, protegiendo contra padecimientos oculares, cardiovasculares, cáncer.
La técnica se basa en aminorar al extremo el riego en la etapa de cultivo más resistente, y aumentar la distribución de agua según inicia la etapa de cultivo más tensa.
Posterior a tres años de estudiar dos tipos de tomates cherry y otras nueve variedades, tanto en otoño como en primavera, científicos han comprobado que el método riego deficitario controlado puede ser provechosa para la plantación de tomates.
Lo idóneo es analizar la condición hídrica de la planta, según sus necesidades proveerle agua en el tiempo propicio. No se trata de usar la mitad de agua así no más.
Esta técnica, favorece al agricultor, ya que es un comienzo hacia los productos hidrosostenibles. Estos productos destacan por un consumo mínimo de agua y energía.
Asimismo, provee un beneficio extra al que adquiere un artículo de mayor calidad nutricional y sostenible con el entorno natural.
Los consumidores piden alimentos mas sanos que les ayuden a vivir mas tiempo y con una mejor calidad de vida.