El Consorcio de Investigación del Golfo de México (CIGOM); unen esfuerzos con la UNAM (Universidad Autónoma de México), para llevar a cabo; una investigación que identifiquen bacterias que degradan el Petróleo, y algún otro tipo de hidrocarburos. El objetivo; es principalmente saber qué clase de bacterias permiten la degradación, para luego cultivarlas y evitar posibles derrames que dañen aún más el medio ambiente.
Un proyecto que evalúa la degradación a través de los hidrocarburos
Por el momento; para realizar el estudio, afirman que las bacterias las obtienen del mar, en aguas profundas. Las muestras; son tomadas mediante sedimentos que yacen en el fondo del mar, con ayuda de un nucleador que las extrae, para posteriormente ser estudiadas.
Luego de obtener las muestras; los sedimentos extraídos se almacenan en botellas, luego son almacenadas con nitrógeno líquido, mientras que el agua, filtrada se lleva a un laboratorio especializado; para luego ser congelada y extraerle el ADN, y así determinar con exactitud sus propiedades.
Para llevar a cabo los procesos mencionados anteriormente; se utilizan dos procesos innovadores, uno de ellos es la metagenómica, que una rama de la genética que estudia el material genético, a través de muestras ambientales. Por otro lado; también se valen de la metataxónomica, que estudian la clasificación de los organismos.
«Si bien; lo que se quiere es identificar las bacterias que degradan los hidrocarburos, debido a las recientes reformas petroleras, se han aprobado las perforaciones para la búsqueda de crudo y otros elementos, lo cual pone en riesgo la capa de ozono, y fomenta la aparición de nuevos derrames; por lo que, es importante saber cómo y cuándo actuar, en especial, crear planes de contingencia», aseveraron los investigadores.
Cuando existen manchas de petróleo en el fondo del océano; algunas bacterias lo que hacen es ingerirla. Lo increíble de esto; es la capacidad que tienen estos organismos de degradar un hidrocarburo tan potente como ese. Posteriormente; esto desencadena una etapa de mineralización, y así convertirse en Dióxido de Carbono y agua, por esta razón el potencial biotecnológico es grande.
