El ADN; también conocido como ácido desoxirribonucleico, es la clave para descubrir los enigmas de la genética. En él, se acumulan un sin número de configuraciones de la constitución humana. A su vez, el ADN; es el medio por el cual la crianza se graba en nuestra naturaleza.
La clave de los grandes enigmas de la ciencia: el ADN
De otra forma no habría podido ser; el debate eterno de ¿es naturaleza o crianza?, de manera que, El ADN nos permite el principio de la vida, el nacer, mientras que, el aprendizaje nos dice que conforme evolucionamos, nos vamos haciendo. Pero; esto no es tan certero como podemos llegar a pensar, la naturaleza alberga mucho más que eso, la acumulación de células en nuestros genes, ocasionan cambios en todo momento, es allí donde interviene el papel de la mutación.
La mutación; está presente en cada uno de los renglones del ADN; son sin duda, la clave de estudio de muchas enfermedades en la actualidad. Cada una de las neuronas, células de nuestro hígado, lleva consigo; una especie de copia del genoma humano, y gracias a la bondadosa naturaleza, esto se ha podido estudiar a lo largo del tiempo. Este no sólo es la transmisión de los caracteres de padres a hijos; sino también el funcionamiento de cada uno de los sistemas, células, músculos y huesos a lo largo de la vida.
Nacemos con docenas de talentos y virtudes alojados en nuestro ADN; talentos, que son explotados en el transcurir del ciclo de la vida. Pero; cómo podría ocurrir ésto, pues simple, existen distintas zonas del cerebro que se conectan porque están formadas por un mismo tejido, como una especie de telar, ese telar se va tejiendo, creando nuevas formas, formas que crecen durante el desarrollo.
El ADN; ha puesto de manifiesto, la evolución humana al alcance de la ciencia. Sobre todo; es importante destacar que es provisto como un método de replicación que puede ser usado para bien o para mal, lo cierto es, que alberga un maravilloso enigma, en consonacia con transcurrir del tiempo.
