Entre todas las fascinantes áreas de la ingeniería, la Ingeniería aeroespacial es simplemente maravillosa aunque poco valorada por muchos. Es por ello, que la estudiante Emily Briere se propone demostrar lo contrario
Ingeniería aeroespacial y tradición
El objetivo propuesto se establece a través del envió de una capsula del tiempo a la superficie del planeta madre. De este modo, Emily pretende dar a conocer el trabajo arduo que requiere el simple hecho de mandar tan solo un sonda al espacio
Además, se aspira a su vez mantener la tradición de las capsulas del tiempo. Entonces, con esto se tiene la esperanza de preservar recuerdos de la civilización actual en comparación al futuro donde posiblemente científicos o individuos hallen dicho artefacto.
En este sentido, una capsula del tiempo es un compartimiento donde se almacenan objetos de valor sentimental. Acto seguido, dicho contenedor es enterrado o guardado en lugares donde no sea posible encontrarlo a corto plazo. Esta acción de hace con el propósito de conservar en buenas condiciones lo que se desee.
Relacionando esto junto a la ingeniería aeroespacial, surge el interés en Emily de 23 años. La creativa joven es estudiante de ingeniería de la Universidad de Duke es la directora de «Time Capsule to Mars«. Este ha sido el nombre otorgado al proyecto donde se presume crear una sonda capaz de viajar, aterrizar y sobrevivir a nuestro planeta vecino.
La misión por hacer realidad el proyecto surge desde 2013. En primera estancia, no se poseía el apoyo monetario necesario. Contrario a esto, a partir del 2014 ha sido financiado por el Laboratorio de Propulsión Espacial de MIT. A partir de eso, se ha emprendido un viaje con fuerzas y ganas de surgir.
No obstante, todo esta lejos de hacerse realidad. Lo dicho, dado a la gran inversión de 25 millones de dolares para poder concluir el proyecto.